Crece la instalación de piscinas urbanas, tanto en los nuevos inmuebles como en las viviendas existentes
El fuerte calor que marca el mercurio en verano y las dilatadas temporadas estivales que padece Sevilla están disparando la instalación de piscinas en las azoteas de la ciudad, tanto en los edificios de atención al público, como hoteles y alojamientos turísticos, como en las viviendas particulares. Si antes tener una piscina en casa se consideraba un auténtico lujo, hoy se está convirtiendo en una necesidad para poder afrontar el fuerte calor de la primavera y el verano en medio del asfalto.
El Estudio de Arquitectura Honorio Aguilar lleva más de dos décadas pintando de celeste el paisaje urbano de las azoteas andaluzas, y explica el crecimiento de esta tendencia, alimentada por el uso de materiales más duraderos y por el abaratamiento de la instalación. Según explica su director, Honorio Aguilar, “en el proceso de construcción de las piscinas nos tenemos que adaptar a las particularidades de cada edificio. Una de las opciones más económicas, cuya demanda está creciendo mucho, es la de la instalación de un producto de excelente calidad compuesto por material de poliéster reforzado con fibra de vidrio. Los refuerzos están fabricados en el mismo material, con el fin de eliminar partes metálicas que pudieran provocar oxidaciones. Resultan de rápida y eficaz construcción, con una amplía gama de medidas y formas, y ofrecen la posibilidad de un sistema de aislamiento que permite ampliar los meses de baño”, explica el arquitecto.
A su juicio, la piscina de Poliéster es una interesante opción, “que posee la particularidad de un cómodo mantenimiento y fácil limpieza, al mismo tiempo que los fabricantes e instaladores ofrecen normalmente 2 años de garantía en todos los materiales y accesorios, y 10 años de garantía en la estanqueidad del vaso”, destaca.
Y una tendencia en alza es la de la tematización. Honorio Aguilar indica que, “para los clientes más exigentes, existe la posibilidad de recrear en las terrazas urbanas todo un mundo tropical, de cálidas aguas y arena blanca. Cada vez nos demandan más elementos de este tipo, que están haciendo que se puedan diseñar y construir auténticas playas temáticas en estas zonas de ocio privada”.
La tendencia a contar con piscina es generalizada. “Ya las reformas y viviendas de nueva planta las contemplan, pero también se nos está dando el caso de propietarios con inmuebles que se construyeron hace años y ahora quieren reformar sus casas para contar con piscina”, declara el arquitecto.
La evolución de los materiales de obra nos permite, hoy por hoy, poner una pequeña piscina siguiendo unos principios muy básicos que, además, no tienen por qué ser muy costosos. Ese análisis y los requisitos que hacen falta es precisamente lo que evalúa Estudio Honorio Aguilar.
La primera limitación viene marcada por el tipo de vivienda, ya sea unifamiliar o plurifamiliar. En el corazón de Sevilla, muchos de sus edificios están catalogados y en ellos no se permite la instalación de piscina en la primera crujía, un requisito al que se suma que la altura del vaso no podrá sobrepasar 1,20 metros de alto si la edificabilidad está colmatada en la planta en la que se instale.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es el de la resistencia. Cuando la piscina se hace sobre una estructura existente necesita ensayos de carga sobre los elementos estructurales con que se cuenta, y en la mayoría de los casos las pruebas demuestran que no es viable la colocación sin más, por lo que hay que reforzar la cimentación y la estructura normalmente mediante losa armada y estructura metálica independiente, que partiría desde la planta baja de la vivienda o edificio hasta la planta de cubiertas. Esta estructura a reforzar podría ocupar desde un espacio de 3 x 3 hasta otro algo superior, que afectaría a una superficie o habitación similar de las plantas superiores a la plata baja. En el caso de edificio plurifamiliar (pisos, apartamentos, estudios…) podría repercutir en las zonas comunes, o incluso en el perímetro de los patios de luces.
DILATADO APROVECHAMIENTO
Pero todos estos análisis merecen la pena para cumplir el sueño de los propietarios. Y es que, como recuerda Honorio Aguilar, “al final una terraza es calidad de vida. Un baño te cambia el día y te hace disfrutar de un entorno más saludable y aprovechar las corrientes de aire de las plantas superiores, por lo que al disfrute le sumamos el aprovechamiento de los recursos naturales, con el consiguiente ahorro energético y económico”, comenta el director del despacho de Arquitectura Honorio Aguilar, que lleva funcionando desde el año 93 en Andalucía y ha desarrollado proyectos en toda la comunidad autónoma, tanto en rehabilitación como en las obras de nueva planta.
