Este reducido apartamento en la última planta de un edificio de viviendas en el barrio de la Magdalena de Sevilla es la última obra terminada del estudio de arquitectura Honorio Aguilar; es un claro ejemplo de cómo en pocos metros cuadrados disponibles se puede sacar el máximo partido posible con el buen uso de la luz natural, las dimensiones de cada estancia ajustadas a las necesidades reales y la correcta utilización de materiales combinando colores y texturas…por supuesto el mobiliario es aportación del buen gusto de su propietaria y destacan detalles como la utilización del microcemento color gris para el mobiliario de la cocina o los distintos elementos utilizados en la iluminación artificial.